Creepypasta III

No solo los perro lamen


La citada historia le sucedió a una niña de 9 años, hija única de padres de gran influencia en la política local; esta niña tenía todo lo que hubiese querido y deseado una niña normal con buena educación, pero con una soledad incomparable. Sus padres solían salir a fiestas de caridad y reuniones del ámbito político, y la dejaban sola.
Todo cambió cuando le compraron un cachorro de raza grande (esto para que cuidase a la niña cuando creciera), pasaron los años y la niña y el perro se volvieron inseparables. Una noche como cualquier otra los padres fueron a despedirse de la niña; el perro, ya acostumbrado a dormir con la niña, se postraba abajo de la cama.
Los padres se fueron y pronto la niña se sumió en un sueño profundo, ya aproximadamente como a las 2:30 de la madrugada, un fuerte ruido la despertó, eran como rasguños leves y luego más fuertes. Entonces, temerosa, bajó la mano para que el perro la lamiese (era como un código entre ella y el perro) y lo hizo y entonces ella se tranquilizó y durmió otra vez.
Cuando ella se despertó por la mañana descubrió algo espantoso: En el espejo del tocador había algo escrito con letras rojas. Cuando se acercó, vio que era un rastro de sangre que decía así:
"NO SÓLO LOS PERROS LAMEN".
Entonces dio un grito de terror al ver a su perro crucificado en el suelo de su habitación.
Se dice que cuando los padres la encontraron ella no hablaba de otra cosa más que de "¿quién me lamió?" y decía el nombre de su perro, se volvió loca y hasta la fecha está en un manicomio y sus padres, tratando de olvidar lo que hallaron en el cuarto y a su hija, se fueron al extranjero.
Y la incógnita más grande es: según los que fueron a investigar al cuarto de la niña, el perro ya estaba muerto, es decir crucificado en el suelo, desde hace horas. ¿Quién le lamió la mano a la niña debajo de la cama?.
 

La trampa


En Berlín, después de la Segunda Guerra Mundial, había poco dinero, muy poca comida y todo el mundo estaba hambriento.
En aquel entonces la gente contaba la historia de una mujer que vió a un hombre ciego por cruzar la calle y se ofreció a ayudarlo. Ambos se pusieron a hablar y el hombre le pidió un favor: llevar una carta a la dirección escrita en el sobre. Como a la mujer le quedaba de pasada para su casa aceptó.

Cuando se disponía a llevar la carta volteó a preguntarle al ciego si había algo más que pudiera hacer por el pero el hombre se iba corriendo entre la multitud sin su bastón ni sus lentes oscuros. Sospechando del hombre, llevó la carta a la policía.

Cuando los policías fueron a la dirección que indicaba el sobre, se encontraron con una macabra escena: tres carniceros cortaban carne humana y se la vendían a la gente hambrienta.
¿Y que había en el sobre que le dió el hombre ciego a la mujer? Solamente una nota que decía: "Esta es la última que les mando por hoy"
 

No abras la puerta 


La madre de un chico siempre de noche devia trabajar porque tenia doble turno y devia mantener a la familia, un dia el chico y la madre vieron en la tele que en una carcel cercana se habia escapado un asesino sicopata muy agresivo y que la ultima ves que lo abian visto fue por la calle donde quedaba esa casa.
la madre devia ir a trabajar y le dijo al chico que cuando volvia iva a ser de noche que ella tenia la llave o por si acaso no tenia la llave iva a tocar tres veces el timbre o le iva a decir que le abra la puerta y el la iva a reconoser por su voz.
en la noche el chico escucho que golpearon la puerta tres veces, se acerco y esucho que le decian ``ademe da pueta´´, el muy asustado fue a su habitacion y se durmio.
en la mañana siguiente fue a ver quien abia tocado la puerta y cuando la abrio vio a su madre con las piernas cortadas motivo por el cual no llego al timbre y la lengua cortada motivo por el cual no puedo ablar bien y el chico no le reconocio su voz.


Accidente en un Abismo 


Un matrimonio con su hijo pequeño viajaban de noche por una carretera prácticamente abandonada que servía de atajo para cruzar la montaña, sus continuas curvas, la estrechez de la calzada y la espesa niebla que cubría todo el trayecto
hacía que aventurarse por ese camino al filo del abismo fuera realmente peligroso.

De improviso una mujer con la ropa ensangrentada se cruzó en la carretera obligando al padre de familia a frenar en seco, tras el susto el señor bajó del coche con la intención de ayudar a la mujer que muy alterada y llorando les explicó que había tenido un accidente y su coche había caído por el barranco.

La mujer le rogó que la ayudara ya que su bebé aún se encontraba en el vehículo atrapado entre unos hierros y ella era incapaz de sacarle de allí por sí sola. La caída era de varias decenas de metros y aunque el coche había destruido parte de la vegetación, mientras rodaba montaña abajo, de no haberle avisado la mujer muy probablemente nadie hubiese encontrado al bebé nunca, mucho menos con esa niebla que impedía ver a mas de dos metros. El señor guiado por el llanto del niño consiguió llegar hasta el lugar del accidente.
Al rato subió muy nervioso con el bebé en brazos y le preguntó a su esposa dónde estaba la mujer. Esta le respondió que se había sentado en una piedra grande que había al lado de la carretera. Su hijo y ella se entretuvieron unos momentos mientras trataban de buscar señal para llamar a los equipos de emergencia pero cuando miraron ya no estaba.

Entonces el hombre se metió rápidamente en el coche con el bebé y le dijo a su mujer e hijo que hicieran lo mismo. Arrancó el coche y se fueron. Su mujer, muy asustada, le preguntó que por qué se iba con el bebé sin buscar antes a la mujer. El marido le dijo que se tranquilizara y que cuando llegaran a la próxima gasolinera le contaría.

Cuando llegaron, la mujer le pidió explicaciones al marido. Este le contestó que cuando bajó y encontró el vehículo accidentado vio a la mujer que les había dado el aviso muerta. Estaba muy fría y probablemente el accidente se había producido horas antes de que ellos pasaran por ese punto.

El espíritu de la mujer era el que le había pedido ayuda para que salvaran a su hijo.
 

La Sonrisa del Payaso

 "Esta historia lleva circulando por mi pueblo hará más o menos un par de días, no sé si será cierta pero la verdad es que mucha gente no sale de sus casas. Todo empezó hace unas semanas, o puede que meses, cuando se extendió el rumor de que en un pueblecito vecino unos hombres vestidos de payasos empezaron a matar niños, nada nuevo, hasta que hace poco una mujer afirmó ver a los payasos con sus propios ojos...

Decían que eran cuatro y que si te pillaban sola por la calle te daban veinte segundos para escaparte pero si te encontraban... te llevaban a una furgoneta negra que es el automóvil que utilizan para desplazarse.

Una vez ahí te dan a elegir, ¿sonrisa de payaso o corbata? El primero (sonrisa de payaso) consiste en un corte a cada lado del labio formando una sonrisa, luego te ataban con un cordel por detrás de la cabeza y te friegan el corte con zumo de limón o sal, cosas ácidas que hacen que veas al diablo. Y en la modalidad de corbata, te agarran la lengua con unas pinzas y tiran hasta romperla.


No sé cuál de las dos cosas es peor, el hecho es que les de placer violarte al acabar con este sacrificio. Nunca más vuelven a verte.

Si algún día ves a una furgoneta negra con algún payaso pintado ya sabes, corre, o si no, solo tienes veinte segundos para salvarte."